La ola de calor que padece la India, convierte a ese país en un auténtico infierno. Las extremas temperaturas han provocado la muerte de  más de  1.400 personas y hasta el asfalto se derrite a causa de los 47° grados de calor.

Las altas  temperaturas que esta semana se han vivido en la capital de la India han provocado que el asfalto de las calles de Nueva Deli haya comenzado a fundirse, informó la cadena india NDTV.

En el estado de Andhra Pradesh (sureste), por lejos el más afectado, donde las temperaturas alcanzaron a los 47 grados centígrados, 1.334 personas han muerto desde el 18 de mayo pasado, según la agencia Press Trust of India.

Debido al calor extremo, el pavimento se sobrecalienta y hay zonas en las que la pintura se derrite, según se aprecia en una serie de fotografías compartidas a través de las redes sociales.