Los cancilleres de los países que integran la OTAN ordenaron el martes suspender toda cooperación civil y militar con Rusia, y pidieron a sus generales y almirantes que busquen rápidamente la manera de proteger a los miembros de la alianza militar occidental que se sientan amenazados por el Kremlin de Vladimir Putin.

La alianza de 28 miembros, piedra angular de la seguridad estadounidense y europea desde el fin de la II Guerra Mundial, reaccionó así a su crisis más grave en muchos años: la anexión unilateral de Crimea por parte de Rusia.

Estados Unidos y sus aliados han condenado la anexión de la península ucraniana como una apropiación ilegal.

Los ministros, reunidos a puertas cerradas en la sede de la OTAN, acordaron el martes por unanimidad una serie de medidas, como el posible envío de efectivos de la alianza a los países del este como Polonia y los estados bálticos.

Un funcionario civil de la OTAN que asistió a la reunión y que habló con los periodistas después bajo condición de no ser identificado dijo que las medidas incluyen:

— La suspensión de «toda cooperación práctica, civil y militar», entre la OTAN y Rusia. Los funcionarios de la OTAN dijeron que los contactos a nivel de embajadores permanecerán abiertos para asegurar un canal confiable de comunicación.

— El posible despliegue y refuerzo de pertrechos militares en países de la OTAN en Europa del Este, como Polonia y los países bálticos, que se sienten amenazados por las últimas acciones de Moscú.

— Un posible aumento en los niveles de preparación de la fuerza de reacción rápida de la OTAN.

— Una posible revisión de los planes de la OTAN para respuesta ante una crisis, así como del calendario de entrenamientos y ejercicios militares.

Para tranquilizar a los miembros de la alianza más cercanos a Rusia y Ucrania, la OTAN ya ha intensificado sus patrullas aéreas sobre el Mar Báltico y los vuelos de vigilancia con AWACs (sistemas de radar aerotransportados para la detección temprana de aeronaves) sobre Polonia y Rumania.

Antes de la reunión, el jefe de la OTAN restó importancia a las versiones de una retirada de las tropas rusas de aquellas zonas a lo largo de su frontera con Ucrania. El ministerio de Defensa de Rusia dijo el lunes que un batallón de unos 500 elementos se había retirado.

«Eso no es lo que hemos visto», dijo el martes el secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, a la prensa reunida en Bruselas.

«Y esta acumulación militar masiva de ningún modo contribuye a una desescalada de la situación, que todos queremos ver. Por eso sigo instando a Rusia que repliegue sus fuerzas, cumpla con su obligación internacional y entable un diálogo constructivo con Ucrania», agregó.

La canciller alemana Angela Merkel dijo en una conferencia de prensa en Berlín que tampoco podía confirmar ningún repliegue. Aunque Putin haya retirado algunas fuerzas, dijo, «por cierto no es el último paso… la concentración de fuerzas en la frontera ucraniana es muy intensa».

Se calcula que entre 35.000 y 40.000 soldados rusos —equipados con tanques, otros vehículos blindados y aeronaves— fueron emplazados cerca de la frontera con Ucrania, dijo el martes a The Associated Press un funcionario militar de la OTAN, que habló bajo condición de anonimato debido a la naturaleza delicada de la información. FUENTE LISTIN.COM.DO